Entrevista al Prof. Dr. Guillermo Pradíes, Premio Dentista del Año 2022

"Mi primer objetivo ha sido siempre ofrecer la mejor preparación a todos los alumnos que he formado"

El compromiso incondicional del Prof. Dr. Guillermo Pradíes con la profesión y su desarrollo y con sus pacientes le han llevado a alzarse con el Premio Dentista del Año 2022 que otorga el Consejo General de Dentistas de España. Un reconocimiento a más de 30 años de trayectoria en los que el Prof. Dr. Pradíes, actual presidente de la Sociedad Española de Prótesis Estomatológica y Estética (SEPES), ha compaginado su faceta docente –de la que se siente más orgulloso–, la investigación, el servicio a las instituciones colegiales y la práctica clínica, apostando además por la digitalización como motor de transformación de la Odontología.

DM.- Recientemente ha sido usted elegido Premio Dentista del Año 2022, otorgado por el Consejo General de Dentistas de España. ¿Qué supone para usted recibir este galardón en el momento actual de su trayectoria profesional?

Prof. Dr. Guillermo Pradíes (Prof. Dr. G.P.).- Sinceramente, para mí ha supuesto ser consciente de la cantidad de gente que me aprecia, aún sin haber tenido contacto directo conmigo. Es un premio en el que cada colegio profesional de España hace, si así lo considera, una propuesta y finalmente los presidentes de todos los colegios regionales o sus representantes, así como los propios miembros del Consejo, determinan quién tiene, a su juicio, su apoyo para ser nominado. 

Pensar que la Junta Directiva del Colegio de la Primera Región ha tenido a bien presentarme como candidato y que la Asamblea del Consejo lo ha ratificado es, sin duda, un motivo de orgullo y agradecimiento enorme. Quiero aprovechar estas líneas para expresar este agradecimiento de una manera más específica al Dr. Antonio Montero, en representación de mi Colegio, y al Dr. Óscar Castro, en representación del Consejo General de Dentistas de España, por su apoyo en la nominación a este premio. 

Quiero, por otra parte, pensar que al fin y al cabo no soy más que el representante accidental de tantos y tantos dentistas que demuestran día a día delante de sus pacientes, de sus compañeros y de todo el colectivo, su compromiso incondicional y generoso con esta profesión sanitaria. ¡Enhorabuena a todos! Esta consideración es también vuestra.  

DM.- Este premio reconoce los méritos conseguidos en materia de salud bucodental, incluyendo estudios y trabajos de investigación realizados, el posible carácter altruista de su actividad profesional, el reconocimiento nacional e internacional que haya podido obtener, así como sus valores humanos y ética profesional. ¿Cuáles considera usted que han sido sus principales aportaciones a la profesión? ¿Y de qué hitos se muestra más orgulloso? 

Prof. Dr. G.P.- La verdad es que es una pregunta que me cuesta mucho trabajo contestar porque es muy sencillo caer en una interpretación vanidosa de la misma. De hecho, creo que esta pregunta es justamente la que debería usted hacer precisamente a aquellos que han materializado esta candidatura y este galardón. Sin embargo, como sospecho que no va a ser posible hacer un “pasapalabra”, me gustaría, con la mayor humildad posible, dar mi opinión sobre lo que he intentado que fuera mi trayectoria y mis objetivos durante los últimos 30 años. 

Mi primer objetivo ha sido siempre ofrecer la mejor preparación a todos los alumnos que he formado, especialmente en la Universidad Complutense, mi “alma mater”. Como “mal alumno” que he sido siempre, he tratado de que mis alumnos aprendieran de la manera más sencilla y completa posible todo aquello que a mí me costó tanto esfuerzo. Sin duda, mi faceta de docente es la que ha conducido el resto de mi actividad durante toda mi vida. 

Hace muchos años que aposté por la digitalización como motor de la transformación de la Odontología como hoy la conocemos y creo, humildemente, que no me equivoqué

En segundo lugar, he tratado siempre que lo aprendido y lo enseñado se viera reflejado, también de la mejor manera posible, en mis pacientes. He intentado alcanzar la excelencia en cada uno de los tratamientos que he realizado y, aunque obviamente seguro que ha habido muchas veces que no lo he conseguido, sin duda en mi espíritu ha estado siempre el intentarlo. No he olvidado nunca que la profesión que escogí es vocacional y que nos debemos a nuestros pacientes y a velar por su salud bucodental.

En tercer lugar, la Universidad tiene claramente dos facetas indivisibles en la vida del Profesor, la docencia –de la que ya he hablado– y la investigación. En cuanto a la segunda, hace muchos años que aposté por la digitalización como motor de la transformación de la Odontología como hoy la conocemos y creo, humildemente, que no me equivoqué. Desde que empecé a desarrollar mis primeros trabajos de investigación sobre recursos de digitalización, muchas cosas han pasado y nuestro grupo de investigación ha estado ahí siempre con trabajos que hoy se consideran clásicos de referencia en cualquier publicación a nivel mundial. Estamos muy satisfechos de ello y eso se ha proyectado a los alumnos que formamos en el Máster de Odontología Restauradora basada en las Nuevas tecnologías de la UCM, pionero sin duda alguna en este campo. 

Por último, he procurado estar siempre comprometido con todas aquellas organizaciones colegiales, científicas, educativas..., que han querido contar conmigo. En este sentido, mi participación se ha centrado en el Colegio de Madrid, en la Comunidad de Madrid, en SEPES y en el propio Consejo General de Dentistas de España. 

Y contestando a la última parte de la pregunta, mi mayor hito, si es que se ha producido, ha sido poder aportar conocimiento a mis alumnos. Es, sin duda, de lo que me siento más orgulloso.

DM.- En estos más de 30 años de trayectoria, ¿cómo ha conseguido compaginar la docencia junto con la investigación, el servicio a las instituciones colegiales y la práctica clínica? De todos ellos, ¿qué ámbito le proporciona mayores satisfacciones? 

Prof. Dr. G.P.- No existen fórmulas mágicas, el día tiene las mismas horas para todos. Si las usas de una manera, quieras o no, penalizas otra. En mi caso, claramente he penalizado el tiempo para dedicarme a mí mismo en algún tipo de actividad lúdica de descanso o no y, por supuesto, he penalizado el tiempo que debería haber dedicado a mi familia. Del sustraído a mi descanso y entretenimiento, no me arrepiento. Del sustraído a mi familia, sí me arrepiento y aprovecho una vez más para pedir públicamente disculpas por ello. Sin duda alguna, mi mujer y mis hijos han sido los grandes damnificados de mi exhaustiva dedicación al trabajo. Si estas líneas sirven para que alguno de los lectores-víctimas reflexionen sobre ello, ya me daría por más que satisfecho.

En cuanto a qué ámbito me ha dado mayores satisfacciones y, por qué no decirlo, algunas veces mayores disgustos, ha sido y es la docencia.

DM.- Desde su labor formativa dedicado a la docencia, usted ha formado a miles de alumnos como Profesor Titular y Director del Departamento de Odontología Conservadora y Prótesis Bucofacial, así como Director del Máster en Odontología Restauradora basada en las Nuevas Tecnologías de la UCM. ¿Cómo valora el nivel de la formación en estas disciplinas en España? ¿Cuáles considera usted como aspectos a mejorar en este ámbito? 

Prof. Dr. G.P.- En la actualidad el nivel de la formación en Odontología en España es realmente alto, tanto a nivel de los estudios de grado como de los estudios de posgrado. 

Mi opinión es que para formarse hoy en día en la excelencia en Odontología no es necesario salir a ningún otro país del mundo. Puede que haya algún aspecto puntual en el cual un centro extranjero sea más avanzado, pero en general la formación en España está a un nivel muy alto. Sin ir más lejos, el QS World Ranking sitúa a la Facultad de Odontología de la UCM en el puesto 16 del top 50 a nivel mundial. Por supuesto, eso no quiere decir que no tenga sentido salir fuera de España para poder percibir cómo se hacen las cosas en otro sitio; eso siempre es positivo, pero no porque sea necesario para adquirir conocimientos que no puedan ser recibidos en España. 

Respecto a qué aspectos sería bueno reforzar, sin duda alguna y estoy seguro de que hablo por boca de muchas universidades, al menos de las públicas, sería ideal mejorar las instalaciones y los recursos tecnológicos de las mismas. Tenemos grandes docentes, especialmente bien preparados, pero a veces no pueden transmitir lo que desean por falta de recursos tecnológicos. Ésa siempre ha sido mi obsesión y lo que ha marcado el ritmo de evolución del Máster que dirijo: tener siempre todo lo necesario para poder dar formación con los recursos más innovadores posibles. En ese sentido, sí pienso que nos superan en otros países; no en conocimientos, pero sí en recursos.

DM.- La tecnología ha sido y continúa siendo una de sus grandes apuestas, siendo usted considerado mundialmente como uno de los principales investigadores y promotores de la implantación de la digitalización, la inteligencia artificial aplicada y las nuevas tecnologías en el entorno odontológico. ¿Cuáles han sido los últimos avances o descubrimientos en cuanto a la implantación de la digitalización, IA y nuevas tecnologías en la odontología? ¿En qué proyectos está trabajando actualmente en este sentido? 

Prof. Dr. G.P.- Yo creo que hoy en día lo que nos está dando mayor capacidad para mejorar nuestros tratamientos es la posibilidad de la “integración de archivos digitales”. 

En la actualidad estamos cada vez menos preocupados en cómo de bueno es un escáner intraoral, un aparato de radiología, un sistema de navegación dinámica, etc. y más preocupados por cómo integrar correcta y eficientemente toda la información que nos proporcionan de manera coordinada los distintos tipos de archivos de trabajo. 

Es decir, estamos más preocupados e interesados en el “software” que en el “hardware” y más interesados en las soluciones web, con todo residiendo en la Nube, que en las soluciones para los servidores de nuestras propias clínicas. 

Lo que realmente da valor hoy en día a nuestro trabajo digital es cómo de bien podemos integrar el CBCT de un paciente con su STL del escáner, con sus fotografías, con sus movimientos mandibulares, etc. para lograr un diagnóstico y un plan de tratamiento “digitalmente guiado” de alta predictibilidad. Es en lo que trabajan los softwares de alineadores, de cirugía guiada, de diseño digital de la sonrisa, etc. Por supuesto, TODOS ellos se benefician ya de herramientas y recursos relacionados con Inteligencia Artificial. Por cierto, no hay que tenerla tanto miedo y sí entender claramente en qué basa su funcionamiento, su enorme utilidad y también sus limitaciones, ya que tiene más de las que nos hacen creer actualmente los medios de comunicación. 

En cualquier caso, insisto, de lo que va ahora y de lo que van a ir los próximos años los desarrollos digitales es del concepto Cloud, las aplicaciones colaborativas y la desaparición de los dongles, el software y los altos requerimientos hardware de nuestros equipos. Las grandes empresas lo tienen muy claro y ya han empezado a ponerse las pilas, como decía antes, como muestra, un botón…. DS Core, Smile Cloud con Straumann, 3Shape, Align/ Exocad, etc. por poner sólo algunos ejemplos que nos suenen a todos. 

En cuanto a en qué estamos trabajando ahora a nivel de investigación, tenemos precisamente abierta una línea de Inteligencia Artificial aplicada al diagnóstico radiológico en sus distintas vertientes. Desde la detección automática de caries, etc. en radiografías hasta la planificación automatizada de implantes en planificaciones sobre CBCT. Es una línea en la que no llevamos demasiado tiempo trabajando, pero que ya cuenta con importantes frutos en publicaciones internacionales de alto impacto. [...]

Puede consultar esta entrevista al completo en el número 79 (Octubre 2023) de DM El Dentista Moderno.