Revista
Investigadores subrayan la importancia de establecer un protocolo de protección previo al procedimiento dental, que incluya el uso de enjuagues bucales con antisépticos de alta eficacia para controlar la carga bacteriana y vírica a lo largo de los procedimientos odontológicos. Esta ha sido una de las conclusiones del Simposio “¿Qué ha aprendido la odontología de la pandemia?”, celebrado en el marco del PER-IADR en Marsella, en el que se realizó una retrospectiva de las medidas recomendadas en odontología para protegerse de las infecciones por el coronavirus SARS – CoV-2, tras más de dos años de pandemia.
En muchos países, los dentistas y el personal de sus consultas se vieron inicialmente afectados por una prohibición profesional, junto con otros grupos profesionales, ya que el riesgo de infección se consideraba demasiado alto, principalmente debido al elevado número de personas infectadas asintomáticas y, por tanto, potenciales portadoras dentro de la consulta. Además, las medidas preventivas recomendadas (distancia social, mascarillas) no eran viables al realizar procedimientos dentales, cuando se producen aerosoles con frecuencia. Sin embargo, esta prohibición profesional se levantó con relativa rapidez al cabo de pocas semanas, después de que las organizaciones odontológicas nacionales e internacionales elaboraran unas directrices que debían aplicarse para la protección del personal y los pacientes, incluyendo el uso de enjuagues bucales previos al procedimiento con agentes viricidas. "What has dentistry learned from the pandemic?" ha sido el título de este simposio en el que expertos de renombre internacional de diversas disciplinas destacaron diferentes aspectos.
La situación en la consulta dental fue analizada por el Dr. Fridus van der Weijden, de ACTA, Países Bajos, en su conferencia "Aerosoles en el entorno dental: un tema brumoso". Ha sido miembro del grupo de expertos que contribuyó a la pronta reapertura de las consultas dentales en Los Países Bajos tras el inicio de la pandemia, desarrollando las "Directrices de Corona de Cuidado Oral". En la odontología, debido a los procedimientos que generan aerosoles, existen varios riesgos potenciales de infección para los pacientes y para quienes trabajan en este campo. La mayor densidad de aerosol se encuentra alrededor del paciente. Los estudios han demostrado que los microorganismos de la boca y las vías respiratorias pueden ser transportados en estos aerosoles y salpicaduras. Éstos pueden contaminar las membranas mucosas de la boca, las vías respiratorias y los ojos del profesional de la salud dental, así como las superficies y los materiales expuestos en el entorno. Por ello, es importante prevenir la transmisión de enfermedades en la consulta dental. Según van der Weijden, "el enjuague previo al procedimiento durante 60 segundos debe ser una de las medidas que se apliquen de forma rutinaria para proteger a los profesionales de la odontología y minimizar la transmisión de patógenos de paciente a paciente. Junto con el equipo de protección personal y la evacuación de alto volumen (HVE), se ha demostrado que reducen el riesgo de transmisión de enfermedades y la contaminación cruzada".
El Dr. David Herrera, catedrático de Periodoncia de la Universidad Complutense de Madrid (España) y presidente de este Simposio, afirma que "los dos años de pandemia de COVID-19 nos han demostrado ahora más que nunca que la boca no es un sistema aislado dentro del conjunto del organismo, ya que es una vía de entrada de virus y bacterias que pueden afectar a nuestra salud, pero también por la asociación de la periodontitis con diferentes afecciones sistémicas, como las enfermedades cardiovasculares o la diabetes, y más recientemente, las complicaciones asociadas a la COVID-19". Por ello, Herrera destacó la importancia de los cuidados bucodentales como parte de las recomendaciones de salud preventiva, así como de las revisiones dentales periódicas, también y especialmente en situaciones de pandemia, para prevenir factores de riesgo evitables. En este contexto, ve indicado el uso de enjuagues bucales antisépticos, no sólo para evitar la transmisión del virus, sino también para mantener la salud periodontal en los grupos de riesgo. La conclusión del Prof. Herrera, que se convirtió en un llamamiento, pidió un esfuerzo aún mayor por parte de la profesión odontológica, pero también de las organizaciones correspondientes, para educar al público sobre la influencia de la salud bucodental en la salud general, y para seguir propagando incansablemente la importancia de la higiene bucal diaria.
Se ha demostrado que la combinación de cloruro de cetilpiridinio (CPC) y clorhexidina (CHX) produce una potente acción antiséptica, que puede dar lugar a una rápida reducción de la carga bacteriana y vírica en la cavidad bucal, reduciendo la propagación de bioaerosoles infecciosos. Así, esta sencilla medida puede ser muy eficaz para proteger al personal del consultorio y a los pacientes.
En esta misma sesión, el Dr. Fabian Cieplik, que es profesor asociado del Departamento de Odontología Conservadora y Periodoncia del Hospital Universitario de Ratisbona (Alemania), presentó las conclusiones de su último estudio clínico, en el que se demuestra que los colutorios CPC y CHX reducen significativamente la carga viral y la infectividad en pacientes con COVID-19. Este hallazgo reafirma la necesidad de incluir este paso en el protocolo de atención previo al tratamiento dental como una medida de seguridad eficaz.
"Si el uso de mascarillas no es posible en determinadas situaciones, como en una consulta dental, el enjuague con colutorios antisépticos sería una alternativa prometedora", concluyó el virólogo Dr. Dieter Hoffmann, en su intervención sobre "El papel de la cavidad oral en el SARS-CoV-2- y otras infecciones virales".
Durante la pandemia, varias asociaciones profesionales y organizaciones dentales actualizaron sus protocolos de atención al paciente, recomendando el uso de enjuagues bucales que contenían CPC y clorhexidina. "El enjuague previo al procedimiento puede permitirnos reducir el riesgo de posibles infecciones tanto en la consulta dental como en otros entornos similares", señaló el Dr. Cieplik.
Fumar o vapear no solo afecta a los pulmones, sino que también dificulta la cicatrización, reduce el oxígeno, altera el microbioma bucal y aumenta el riesgo de infecciones como la periimplantitis: una inflamación crónica que puede hacer fracasar el implante incluso años después.
Los espacios interdentales siguen siendo los grandes olvidados por el 62% de la sociedad en su rutina diaria de higiene.
Esta formación se ha llevado a cabo en 11 ciudades de diferentes puntos de España
Existe un trastorno compulsivo denominado pagofagia, que puede provocar daños graves en el esmalte dental, fracturas y dolor de muelas y articulaciones maxilares.
La doctora Laura Pérez alerta de que el verano es una época especialmente delicada para quienes llevan ortodoncia, férula de descarga o retenedores, ya que un despiste en vacaciones puede echar por tierra meses de tratamiento.
Este curso pretende que los alumnos sean competentes en la realización de los pasos necesarios para poder llevar a término una investigación de calidad (protocolo de investigación, análisis estadístico, redacción de la publicación).
La Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria ha celebrado un encuentro con sociedades científicas del ámbito médico y de la enfermería para poner en valor el Código Ético del sector respecto al marco de colaboración entre ambas partes.
El Dr. Luis María Ilzarbe Ripoll, experto en prótesis totalmente cerámica y Odontólogo Estético en Ilzarbe García-Sala Clínica Odontológica, nos explica cómo la tecnologia ha cambiado la realidad de la profesión y de las clínicas dentales, detallando cada uno de los beneficios de la integracion del flujo digital.
El Dr. Pedro Guitián, Director Médico y fundador de la Clínica Guitián (Knotgroup) y ZAGA Center de Vigo, nos habla sobre la transformación que conlleva la incorporación del flujo digital en la clínica dental, apuntando al paciente como el mayor beneficiario de este proceso digital.
A partir de esta promoción, los egresados del programa obtendrán, además de su título universitario, la acreditación como Especialistas en Prostodoncia por la European Prosthodontic Association.